Universidad Nacional Autónoma de México
Reproducción de los animales domésticos
Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia
Capítulo 25. Prácticas de manejo reproductivo e instalaciones en las especies de interés zootécnico

25.6 MANTENIMIENTO DE LA LIBIDO DURANTE LA MONTA NATURAL

Mantener la libido es esencial en un programa reproductivo eficiente, ya sea durante monta natural en campo o en corral para colección de semen. En los machos resulta normal el mostrar una baja temporal de la libido después de cada eyaculación. Este periodo de relativa inactividad sexual por lo general aumenta en duración con cada eyaculado sucesivo sobre una misma hembra, por lo que ante un nuevo ente receptor se restablece la libido.

Se encontró que los verracos montaban una sola vez con determinada cerda en celo durante un periodo de 40 minutos. Sin embargo, cuando se les colocaba en un corral con un mayor número de hembras receptivas, los mismos verracos tenían ocho eyaculaciones en 135 minutos. En contraste, encontraron que la presencia simultánea de dos cabras en celo redujo el número de montas realizadas antes de una segunda eyaculación por machos cabríos, así como la latencia entre eyaculados. El incremento en la libido al ser expuestos ante nuevas o más hembras, estimula a los machos de especies polígamas a cambiar su atención de una hembra a otra durante su reproducción. Este efecto parece tener un origen multifactorial, ya que secreciones vaginales de diferentes ovejas en celo, no parecen tener efecto en el comportamiento sexual de los carneros.

En los toros y machos cabríos, el presenciar la cópula de otro macho estimula la conducta sexual del primero; lo que no sucede en todos los carneros, sólo en los machos sumisos. Aparentemente esto se debe a que las vacas y cabras participan comúnmente montándose entre ellas durante el estro, pero las ovejas no lo hacen, y evolutivamente se supone que los toros y los machos cabríos eran atraídos hacia grupos sexuales de hembras que se montaban entre sí (figura 10).

Figura 10. Vaca en proestro montando a vaca que se encuentra en estro.

En el caso de estas dos especies, también existe una ventaja en ser el primero en copular con las hembras sexualmente receptivas, ya que en estas especies la receptividad puede terminarse después de dos o tres cópulas. Contrariamente, las ovejas generalmente permanecen receptivas aún después de varios servicios.

Durante la colección de semen la fatiga sexual resulta más obvia. La eficiencia de un programa de colección de semen depende de mantener una libido adecuada. Las variables de interés particular son el “tiempo de reacción” (tiempo entre la exposición al estímulo y la eyaculación) y el número de eyaculaciones que se obtienen por sesión de colecta.

La presencia de semen en la vulva de la oveja reduce el intervalo entre eyaculados. Lo que sugiere que los carneros pueden identificar que las hembras que hayan copulado recientemente y en un esfuerzo por preñarlas, reducen su tiempo de reacción. Al mismo tiempo que durante su cópula, extraen hasta el 50% del semen del macho con el que se efectuó la cópula previa. También la presencia de un nuevo animal estímulo (hembra en celo), así como los cambios en el entorno, mejoran la eficiencia de colección de semen al reducir el intervalo entre eyaculados, pero esto es más notorio a medida que se obtiene un mayor número de eyaculados.