12.4 FERTILIZACIÓN

12.4.1 CONSIDERACIONES GENERALES

El principal punto a considerar de la fertilidad de los bovinos es el tiempo que transcurre para que cada vaca quede gestante ya sea por primera vez siendo novilla o de nuevo después del parto. Esto debido a que se instala un período de inactividad ovárica asociado a la época del parto y la oferta de forraje; a la condición corporal (CC) de la vaca al parto y su dinámica folicular hasta el final del período de apareamiento; a la producción individual de leche y los requerimientos de las crías; a la presencia del becerro y el estímulo del amamantamiento; además de factores como raza, edad, paridad y enfermeda (figuras 4 y 5).

En sistemas extensivos de cría, el primer apareamiento de novillas se efectúa en torno a los dos años de edad con el objetivo de reducir su fase no productiva. Esta no es necesariamente la edad a la pubertad, que en función del sistema de cría, ya pudo haber sido alcanzada por las novillas en su primer año de vida. Sin embargo, se sabe que la primera ovulación fértil debe ocurrir entre los 17 y 24 meses de edad, dependiendo del nivel nutricional, desarrollo corporal, estación del año, factores de manejo y tratamientos hormonales. En los sistemas extensivos de cría de bovinos de carne el peso corporal considerado como el ideal de las novillas al primer apareamiento es de aproximadamente el 60% del peso adulto de las vacas en las razas europeas y el 65% para cebuinas, asociadas a CC de 4 o 5 (En escala del 1 al 9). En estudios recientes se observó que efectivamente el peso corporal de las novillas derivadas de cruces comerciales entre cebuinos y taurinos fue importante en la tasa de preñez, habiéndose constatado que el peso mínimo de las novillas gestantes fue de 306 kg.