Universidad Nacional Autónoma de México
Reproducción de los animales domésticos
Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia
Capítulo 21. Inseminación artificial

21.10 INSEMINACIÓN ARTIFICIAL EN PERROS

La perra tiene pocas oportunidades de quedar gestante ya que es monoéstrica y solo presenta dos ciclos por año. La perra presenta una fase folicular muy larga dificultando la identificación del momento óptimo de la inseminación artificial ya que durante toda esta fase acepta al macho. Se han desarrollado estrategias para mejorar el momento en el que se realice la inseminación artificial y esta sea más exitosa. La mayoría de estas son laboriosas y se tienen que realizar varios días consecutivos para tener éxito como lo es la citología vaginal (cambios en las células epiteliales de acuerdo con los estrógenos presentes en sangre), la determinación de las concentraciones de progesterona en sangre, ultrasonografía de los folículos o incluso el uso de endoscopía.

Cuando se utiliza semen fresco o semen frío se puede inseminar el día de la detección de la ovulación y una segunda dosis 2 días después, sin embargo, si se utiliza semen congelado lo ideal es una inseminación dos días después de la ovulación. Se espera una fertilidad cerca del 70% aunque es sumamente variable y un promedio de 6.3 ± 2.8 cachorros por camada.

El método más utilizado en la inseminación artificial es el depósito profundo del semen en la vagina de la perra siendo un método económico y el más usado en clínicas de bajo presupuesto (figura 22). El segundo método es el depósito intrauterino de semen que se puede hacer por vía quirúrgica o no quirúrgica vía transcervical por medio de un catéter. Es importante mencionar que la mayoría de las clínicas a nivel global utilizan el método transcervical por cuestiones de la legislación sobre bienestar animal.

Figura 22. Método de inseminación en la perra.

Durante años se han realizado ajustes a los diferentes métodos de inseminación artificial, por ejemplo, el método no quirúrgico transcervical intrauterino que se usó por primera vez en 1975 y fue adaptado de las zorras a las perras. Este método utiliza no uno sino dos catéteres de los cuales uno es externo y un interno de metal más delgado. Este método se recomienda sobre todo cuando se utiliza semen de baja calidad o semen congelado.

Otro método que ha sido modificado es el método de endoscopía utilizando un endoscopio rígido el cual es introducido en la vagina acompañado por un lado de un catéter flexible y este es guiado a través del orificio del cérvix bajo control visual depositando el semen en el útero de la perra y con resultados muy favorables (83% y 7.5 cachorros por camada).

A pesar de existir técnicas nuevas en el proceso de inseminación artificial en perras se cree que la utilización de vaginoscopio para realizar la inseminación intrauterina será el método moderno más económico y más usado en esta especie. Este método tiene el inconveniente de que el técnico tendrá que desarrollar habilidad para hacerlo exitosamente.

El camino recorrido en el desarrollo de técnicas reproductivas ha sido muy largo a través de la historia y aún queda mucho por recorrer. A pesar de las técnicas que hoy en día se encuentran tan perfectamente descritas, hace falta mucho por hacer en el trabajo de campo, por lo que en conjunto nuestra labor todavía continúa creciendo.