21.7 INSEMINACIÓN ARTIFICIAL EN PEQUEÑOS RUMIANTES
La inseminación artificial ha cambiado la industria de los pequeños rumiantes y ha permitido una gran mejora genética, mejor control de la reproducción y las enfermedades de transmisión sexual, y la preservación de la genética de las razas en peligro de extinción. Los últimos desarrollos en esta tecnología se han centrado en preservar la capacidad de vitalidad/fertilización de los espermatozoides frescos y congelados al mejorar la composición de los diluyentes y al cambiar los protocolos de enfriamiento/congelación. El otro problema principal es el desarrollo de técnicas mínimamente invasivas para el depósito adecuado de semen fresco o congelado.
21.7.1 MÉTODOS DE INSEMINACIÓN
Mediante el uso de semen fresco, las técnicas de inseminación vaginal (pericervical intracervical, resultan en tasas de gestación aceptables (video 3). Sin embargo, al usar semen congelado, las técnicas de inseminación intrauterina laparoscópica o transcervical son el único medio para lograr tasas de gestación aceptables. La criopreservación induce una disminución de la viabilidad y la motilidad, como consecuencia un número limitado de espermatozoides congelados/descongelados puede transitar por el cuello uterino. Por lo tanto, para lograr una tasa alta de gestación con semen congelado, el semen debe depositarse directamente en la luz uterina, cerca del sitio de fertilización. Técnicamente, la inseminación artificial en cabras es muy similar a la de las ovejas, pero lograr la inseminación intrauterina a través del cuello uterino es mucho más fácil en cabras que en las ovejas. La inseminación de las cabras con semen fresco produce tasas de fertilización que son comparables con la monta natural. Las tasas de gestación después de la inseminación cervical con semen congelado son más altas en las cabras que en las ovejas, pero aún no son del todo satisfactorias.
Durante la última década, el semen sexado se encuentra disponible y está siendo utilizado para la inseminación artificial en las ovejas con resultados notables. Desde el punto de vista de bioseguridad, los diluyentes definidos químicamente pueden llegar a tener un rol importante en el futuro.
