22.9 TRANSFERENCIA NO QUIRÚRGICA
La técnica para realizar la transferencia de embriones más difundida es la no quirúrgica y es usada con mucho éxito por la mayoría de los veterinarios. Casi todos utilizan pajuelas francesas de 0.25, una pipeta descartable plástica y una pistola de Cassou para TE (para pajuelas de 0.25). También hay unas modificaciones como pipetas metálicas (figura 9).
La receptora es ubicada en una manga de manejo y se palpa para ubicar al ovario que contiene al CL. Se coloca anestesia epidural baja (lidocaína al 2%). La región perineal y vulva se lavan con jabón desinfectante, agua y se secan.
El embrión se coloca dentro de una pajuela esterilizada (0.25 ml) de la siguiente forma (figura 10):
La primera columna de medio humedece el algodón y el alcohol polivinílico del extremo cerrado de la pajuela, esto sella un lado y no permite la salida del embrión antes de ser transferido. La pajuela con el embrión se coloca dentro de la pistola Cassou y ésta dentro de la pipeta plástica.
El operador sujeta el cérvix a través de la pared del recto. La pipeta se introduce en el canal cervical y, posteriormente, se introduce en el cuerno ipsilateral al CL. La pistola se remueve suavemente y se retira la mano del recto (video 2).
Todo ese procedimiento debe realizarse lo más rápido posible. Si hay mucha demora la posibilidad de preñez será menor por daño en la mucosa uterina por exceso de manipulación (la manipulación del cérvix no parece ser tan negativa). Para obtener un buen porcentaje de preñez, aparte de la destreza y experiencia en las técnicas descritas, es necesario que las receptoras sean animales sanos, que sus ciclos reproductivos hayan sido normales y que estén en buen estado nutricional. Si las receptoras están en buenas condiciones, la eficiencia de la transferencia de embriones, traducida en preñeces, será mayor.
El porcentaje de preñez obtenido por el método no quirúrgico varía del 35 al 65%, dependiendo de la calidad de los embriones transferidos, de la habilidad del operador, el estado del CL y de las receptoras. Generalmente, el porcentaje de preñez es de alrededor del 60% con embriones frescos y 40 a 50% con embriones congelados. Se puede anticipar una pérdida del 5 al 10% desde la detección de preñez por ultrasonografía a los 30 días y el parto. Normalmente una vaca promedio por tratamiento superovulatorio produce 10 a 12 ovulaciones con 8 a 10 embriones recuperados, de los cuales 5 a 6 son transferibles terminando finalmente con 3 o 4 preñeces.
